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De G.M. Frongia

¿Cuánto tiempo dedicas a la lectura en clase? ¿Lees en voz alta a tus estudiantes? ¿Es la lectura en voz alta una actividad exclusiva de las escuelas primarias?

En el ajetreo de la educación moderna y súper tecnológica, la tradición de la lectura en voz alta parece desvanecerse a medida que los estudiantes avanzan en su escolaridad. Muchos creen que la lectura en voz alta es solo adecuada para niños pequeños, desestimando su relevancia para los estudiantes mayores. Sin embargo, contrariamente a esta percepción, la lectura en voz alta en clase ofrece numerosos beneficios que trascienden los límites de edad.

Como educador en una escuela secundaria, o “colegio” como se le conoce en España, he sido testigo de primera mano del impacto transformador de la lectura en voz alta en mis clases de idiomas. A pesar de los años adolescentes de mis estudiantes, he hecho un esfuerzo por integrar esta práctica en nuestra rutina, reconociendo su profunda importancia en la adquisición del lenguaje y en fomentar el amor por la literatura.

Los beneficios de la lectura en voz alta

La lectura en voz alta crea un ambiente propicio para el aprendizaje de idiomas al sumergir a los estudiantes en el idioma objetivo y exponerlos a una pronunciación auténtica e entonación. Sirve como una puerta de entrada a la exploración cultural, ofreciendo ideas sobre diversas narrativas y perspectivas.

Además, la lectura en voz alta despierta la curiosidad y el compromiso entre los estudiantes, encendiendo su imaginación y fomentando una apreciación más profunda por la palabra escrita. A través de la narración de cuentos, los estudiantes no solo mejoran su vocabulario, sino que también desarrollan habilidades de pensamiento crítico al analizar personajes, desarrollos de trama y elementos temáticos.

Estrategias para la implementación

Introducir la lectura en voz alta en clases de idiomas requiere una planificación cuidadosa. Aquí hay seis estrategias para incorporar efectivamente esta práctica:

1. Selección del material: Elije textos apropiados para la edad de tus estudiantes y que se alineen con sus intereses y su nivel de competencia lingüística.

2. Involucra a tus estudiantes en este proceso: no todos los estudiantes pueden ser ávidos lectores por lo tanto bríandale apoyo leyendo de manera fluida y comprensible. Este enfoque ayuda a construir confianza y a desarrollar habilidades de comprensión.

3. Crea un ambiente propicio: Prepara el salón de clase o el espacio que tienes a disposición para la lectura en voz alta creando un ambiente cómodo y acogedor. Considera factores como la iluminación, la disposición de los asientos y si puedes proporciona copias impresas del texto.

4. Comienza de forma sencilla: Inicia cada sesión de lectura con una breve introducción a la historia, animando a los estudiantes a hacer predicciones y haciendo preguntas para que puedan conectar lo que van a leer con sus conocimientos previos.

5. Timing: Asigne un tiempo específico dentro del horario de clase para la lectura en voz alta, equilibrando la duración para mantener el compromiso sin abrumar a los estudiantes (entre 10 y 20 minutos son suficientes).

6. Evaluación de la comprensión: Pausa regularmente durante la lectura para verificar la comprensión a través de discusiones informales o preguntas de comprensión. Este enfoque garantiza que los estudiantes participen activamente con el texto y obtengan ideas significativas.